“Lo que Dios quiere de vosotros es que seáis santos”. Ef 1,4.
Feliz coincidencia que en las vísperas de la fiesta de Pentecostés, día de la Acción Católica y del Apostolado Seglar, en la parroquia de S. Juan de la Cruz de La Carolina tuviera lugar una conferencia para conocer con mayor profundidad la vida y la obra de Manuel Lozano Garrido “Lolo”, seglar que vivió plenamente vinculado a la Acción Católica y que será beatificado próximamente en su tierra natal el día 12 de junio.
D. José Utrera Infantes, amigo personal y vicepresidente de la Asociación Amigos de Lolo dio un magnífico testimonio desde su vivencia tan próxima a Lolo, su gran amigo, que dejó una huella entrañable en él para siempre. Realizó una pequeña biografía de este hombre de Dios, dio unas pinceladas sobre su infancia y se refirió a su inscripción en la Acción Católica tras la Primera Comunión. Aprendió a vivir en este institución eclesial que fue todo para él. Su casa era la sucursal de la Acción Católica y su lema “Llevar almas de joven a Cristo”. Cuando era aspirante conoció a su paisano san Pedro Poveda y prosiguió hablando de su trabajo en la cárcel con jóvenes de la A. Católica y de su vida durante la guerra civil. Habló de sus estudios de magisterio, que nunca ejerció, destacando como Manuel Garrido era un hombre abierto a la acción del Espíritu, persona que enganchaba y comentó su gran obra “Sinaí” así como su labor periodística y literaria y las innumerables visitas de las diferentes personalidad que le visitaron en su hogar. Concluyeron sus palabras aludiendo a los informes de los teólogos que estudiaron sus virtudes en los que se decía que era uno de los testimonios más claros de vida cristiana que debía presentarse como ejemplo y modelo para los creyentes y recordó como todos estamos llamados a la santidad.
Si la santidad es la meta de todo cristiano, don de Dios y respuesta del hombre a su amor, este fue el sentido que orientó la vida Lolo. Su enfermedad y sus limitaciones no le impidieron en ningún momento llegar a la meta, símil utilizado por S. Pablo hablar de la santidad. Respondió generosamente a la llamada del Señor, lleno de su amor y de su gracia, corrió la carrera con su esfuerzo personal, ofreciendo a Dios su larga enfermedad y su dolor, con su vida piadosa centrada en la oración, en la Eucaristía y bajo el amparo de la Virgen vivió su existencia con gozo interior y felicidad personal siendo para los demás fuente de alegría, un buen apóstol seglar.
Hoy en los comienzos de este siglo XXI, con sus luces y sombras, inmersos en una crisis que abarca muchos ámbitos de la vida, damos gracias a Dios por este hermano nuestro, que supo vencer tantísimos obstáculos, que no se cansó de seguir fielmente a Jesús y lleno de su Espíritu fue misionero del Evangelio cada día.
“Mediante el testimonio
admirable de tus santos, Señor,
fecundas sin cesar a tu Iglesia
con vitalidad siempre nueva,
dándonos así
pruebas evidentes de tu amor.
Ellos nos estimulan con su ejemplo
en el camino de la vida
y nos ayudan con su intercesión”.
(Del Misal Romano)
admirable de tus santos, Señor,
fecundas sin cesar a tu Iglesia
con vitalidad siempre nueva,
dándonos así
pruebas evidentes de tu amor.
Ellos nos estimulan con su ejemplo
en el camino de la vida
y nos ayudan con su intercesión”.
(Del Misal Romano)
Pedro F. Criado Menor